2013 mi año de estabilidad

Ser fotógrafo y vivir hoy en día de ello no es fácil, no sé ni siquiera si alguna vez lo fue. Lo que yo sé es que los que empezamos hace relativamente pocos años y sin una familia por detrás de fotógrafos que más o menos te sitúen en tus comienzos, salir adelante es un sin fin de problemas y duro trabajo que puede no dar los resultados en el momento adecuado.

Quizás en ese aspecto me considero afortunado, aparecer de la nada, en plena crisis, sin ningún tipo de trayectoria fotográfica o premios, y conseguir después de unos cuantos años poder vivir de la fotografía, es algo que ni siquiera se me pasaba por la cabeza hace 10 años e incluso menos.

Este año ha sido quizás mi año de estabilidad, de asentamiento, en el que finalmente he ocupado mi lugar y el cual espero se amplíe con los años.

Es curioso como la mente tiene esa facilidad para olvidar y hacer lejano todo aquello que nos atormentó y en algún momento nos agobió hasta tal punto de tener casi que dejarlo todo. Pues la suerte, quizás el duro trabajo, quizás un punto de cada cosa, han hecho que yo siga aquí un año más como fotógrafo, un punto que pudo haber terminado hace ya unos cuantos años, cuando no sabía si podría pagar la siguiente cuota de autónomo.

Al final salimos adelante de una u otra forma, y echamos la vista atrás y lo único que vemos es orgullo, un orgullo tan grande y fuerte que te hace sentir bien, te hace sentir grande, con ganas de comerte el mundo. Pues cuanto más duras hayan sido las adversidades, más jodido te lo hayan puesto, cuantas más cicatrices, mejor preparado y poderoso te sientes.

Un año que no ha tenido altibajos, en el que he disfrutado, he trabajado duro y en el cual también he tenido recaídas por agotamiento mental. No es fácil ser autónomo, trabajar de lunes a domingo, no tener vacaciones, eso a veces llega a cansar incluso cuando eres tan afortunado de trabajar en lo que te gusta. Pero que os voy a contar, el día a día de cualquier persona. Todos tenemos problemas, lo importante es seguir superándolos día a día, porque de eso trata la vida.

Los sueños están para realizarlos o al menos intentarlo.

Por otro lado, habréis notado una menor actividad en el blog, cada vez menos tiempo y menos ideas para compartir. La red está tan abarrotada que a veces cuesta escribir una entrada sin haber leído 20 iguales la semana anterior. Siempre me ha gustado mantener un blog personal y ajeno a lo que se escriba en la red, quizás por eso y otros motivos no estoy manteniendo el ritmo de publicaciones que me gustaría.

También estoy colaborando cada vez con más empresas y marcas de fotografía, para compartir directamente mis impresiones sobre cada producto que pruebo. Nada de leer algo y luego comentarlo, quiero probarlo, tocarlo y escribir un artículo que os haga ver el producto de la manera más real posible, sin publicidad o intereses de por medio. Espero que os estén gustando. Cualquier sugerencia también es bienvenida.

Y para terminar y sin duda alguna lo más importante del año 2013, fue la decisión de Susana y mía de dar el siguiente paso después de muchísimos años de relación, y ser papás. El 4 de marzo está previsto que nazca mi hija Emma, todavía se me pone la piel de gallina al escribir hija o pensar que voy a ser padre. Ni todo el trabajo del mundo, ni nada ha sido capaz de empañar ni un poquito este acontecimiento. Está siendo algo maravilloso y que espero compartir bien prontito con todos vosotros, porque como bien os podéis hacer a la idea, mi pequeña Emma va a tener fotos a diario y por supuesto, os la presentaré lo antes posible en este blog 🙂

¿Qué puedo ahora escribir después de esto?

Pues que para terminar iba a publicar varias fotos en esta entrada, pero son tantas las que me gustan, que más adelante haré una selección y publicaré una entrada sólo de fotos.

Espero que tengáis todos un año 2014 fantástico, que intentéis cumplir vuestros sueños y que por supuesto, recuperemos la confianza y nuestra vida, aún con todas las adversidades que estamos pasando.

Os deseo lo mejor. Gracias por seguir ahí.

Written by Vicente Alfonso