Gatillo fácil
A veces surgen debates sobre si debemos disparar en el momento justo o si por lo contrario, aprovechar las posibilidades de las nuevas cámaras, las ráfagas.
Hace muchos muchos años, las cámaras por normal general no disponían de ráfagas, pero no por ello los que usaban aquellas cámaras se dedicaban a disparar una única vez y a esperar. Recuerdo bien como accionaban el disparador y a una velocidad tremenda cargaban el carrete y volvían a disparar hasta que el carrete terminaba de nuevo.
Ahora no hace falta más que dejar pulsado el botón del disparador y esperar a que se llene el bufer o la tarjeta de memoria ¿Por qué desaprovechar esa ventaja? A veces el momento justo se puede perder por milésimas de segundo, y puede ser irrepetible. Creo que lo importante es ver ese momento y congelarlo, no la necesidad de ser más rápidos que Billy el niño disparando.
Es evidente que las grandes fotos no van a surgir porque disparemos continuamente sin parar, pero una vez tenemos la idea, la composición y todo preparado, la ráfaga puede ser un gran aliado, sobre todo con objetos móviles y personas. Un pestañeo, un movimiento mínimo puedo arruinar un gesto, por lo que disparar dos o tres fotos seguidas nos vendrá genial para inmortalizar justo el momento que queremos.
No creo que sea menos artístico moverte alrededor de una «situación» y disparar continuamente a modo de grabación de video, mientras observamos toda la escena y la vamos inmortalizando. Una vez realizadas las fotos, es posible que encontremos finalmente lo que realmente nos interese, y a partir de ahí nos centramos más en ello.
Yo generalmente disparo varias veces en la misma posición o moviendo la cámara ligeramente, cuando realizo una sesión de fotos a modelos. No quiero perder un gesto, una expresión, un movimiento interesante, por el simple hecho de que disparar ráfaga es de novato, o palabras igual de absurdas que suelen usarse para desprestigiar a alguien que dispara de forma diferente, o que a veces usa algo que no considera «purista» bajo su propio criterio. Me rio de esa palabra y de los que se creen poseedores de ella.
Quizás Purista Digital no se haya usado nunca, pero me gusta señalar con esa palabra en algunas ocasiones. No hace más que referirse en cierta manera a personas arcaicas que aún con toda la tecnología en las manos, se empeñan en seguir disparando como hace 30 años, y desperdiciar 3000 euros invertidos en tecnología.
La tencología y su evolución está para aprovecharla, y creo que siempre habrá similitudes con la época del carrete, ya que la evolución viene de las necesidades, y las necesidades empezaron por cambiar el carrete por una tarjeta digital.
Todavía recuerdo el día que tuve realizar un reportaje a un grupo de baile en interiores. En una hora terminé con unas 1500 fotos. Es imposible congelar el momento exacto en ese tipo de eventos, por lo que la ráfaga es algo obligatorio. Cuando un grupo está bailando, no sirve con ver el momento justo, sino que hay que verlo antes de empezar y después de acabar. Mientras, deberemos haber encuadrado bien y dejar el disparador apretado.
Creo que he dejado clara mi postura, estoy a favor de la evolución tecnológica y aprovechar todas sus ventajas. Y estoy convencido, de que una foto no va a ser mejor porque disparemos en el mismo lugar 200 fotos seguidas.
Las fotos se crean antes del disparo, lo importante es que la veamos.
Y vosotros ¿Qué opináis sobre disparar ráfagas o disparar en el momento justo?
Posiblemente sea una buena técnica, lo malo es cuando tenemos que utilizar el flash. ¿tendrían que hacer flashes tan rápido como nuestras cámaras?.
Un saludo y Feliz año nuevo.
Por supuesto, muchas veces son necesarias y para eso se han inventado, no sabía que existen personas que dicen que eso es de novatos, ellos se lo pierden 🙂
Creo que es más importante saber cuando apretar el botón que ir a lo fácil y tirar cientos de fotos y luego elegir la mejor.
@Angelito: hay flashes rapidísimos, o sino luz continua. Todo depende del bolsillo, como siempre 🙂
@amigo: por desgracia, todavía hay gente que desprestigia el trabajo de algunos, por haber hecho 3 fotos seguidas en vez de una.
@Jexweber: bueno, no creo que sea fácil hacer una buena foto por tirar 3 ó 4 seguidas. Creo que hay momentos imposibles de congelar si no se tira de la ráfaga, por mucha visión fotográfica que se tenga. Creo que lo importante es ver la foto, y luego tener suerte de congelarla en el momento oportuno. Sobre todo en ciertos tipos de fotografía, con aves, rallys, deportes, pasarela… etc.
Un saludo 🙂
Y no necesitaste «años» para procesar esa sesión de 1.500?? 😀
Yo no lo uso como norma ni mucho menos, pero si cuando voy a rallyes o similares, con el modo ráfaga muchas veces he pillado el coche en el momento que deseaba y quizás ha sido en la segunda o tercera foto de la ráfaga y no en la primera como esperaba.
Yo entiendo que la ráfaga puede se necesario en fotos de acción, pero hay gente, que en fotosen las que te puedes tomar todo el tiempo del mundo tira unas cuantas y elige. Ante todo INTENCIÓN, como no cuesta pues tiran muchas y no, eso no es así. Obviamente si vas a la Moto GP, pues si la necesitarás.
Yo la verdad es que en ao y pico la ráfaga solo la he usado para ver cómo era, me gusta más la fotografía creativa y voy con tiempo, y aunque veces pierda una foto, así es como se aprende, así es como seguramente aprendió Cartier-Bresson, no creo que la primera vez que cogiese la cámara empezase a captar instantes decisivos tan magníficos como con los que nos deleitó.
Un saludo
Vicente, que configuracion has utilizado para realizar esta foto?
Coincido con que la fotografía de acción necesita en ocasiones la ráfaga. Y no creo en los puristas. Pero si creo que la ráfaga, al igual que el uso de PS, puede generar flojera fotográfica. No te esfuerzas por mejorar, total dices: después elijo la mejor o después lo fotoshopeo… Eso es perjudicial. Si aprendes a componer bien no necesitarás tanto tiempo en revisar, seleccionar y mejorar las fotos frente al monitor. Antes era el dedo más rápido del oeste, ahora me controlo más, y siento que he mejorado bastante. Y sigo usando la ráfaga cuando el caso lo amerita.
Sinceramente, creo que mientras se hacen 1500 disparos en una hora, es imposible estar concentrado en lo que se fotografía.
Yo dejaría la ráfaga sólo para algunas disciplinas… y para lo demás, un buen click certero.
@Germán: se desechan rápido las que no valen 🙂
@I 8a: pues en retratos, cuando trabajas con gente que no es profesional, el no tirar dos fotos seguidas te puede jugar una mala pasada. Que más da repetir la foto de una en una, que disparar una ráfaga de 5 fotos.
@Carles: en esa ocasión, tiré de aperturas grandes, ISO alto y si la ocasión lo necesitaba, usaba una velocidad de obturación más rápida para congelar el movimiento, por lo que tenía que subir el ISO aún más.
@Bruno Abarca: no te creas. Te mueves por todo el escenario, ves la foto, encuadras y disparas con leves movimientos. La cuestión es sacar una foto de personas que no paran de hacer bailes muy rápidos, y sin ráfaga, sería imposible pillar el momento justo.
El click certero está bien cuando está todo bajo nuestro control. En el momento que haya algo que reacciona al entorno, una ráfaga nos puede echar una mano.
Un saludo y gracias a todos por dejar vuestras opiniones 🙂
en muchos deportes, donde supuestamente se supone que hay que tirar en rafaga, «deporte» por llamarlo de alguna forma, como rallies, surf, skate y demás… mas que tirar en rafaga se tira sabiendo lo que va a ocurrir, como en surf o skate, y eso se sabe, conociendo el tema. no hay mas que ver la gente que tira fotos de esas «disciplinas» sin conocer, luego salen encuadres raros y momentos extraños que nada tiene que ver.
de hecho, para los «puristas tecnologicos» en skate por ejemplo, en las grandes revistas de sector se utiliza equipo analogico en muchos casos.
Creo que lo lógico sería huir tanto del que dispara 2000 fotos con la «esperanza» de que salga una buena, como del llamado purista fotográfico. Ni tanto ni tan corto. Ni tenemos que volver a la época de los daguerrotipos ni podemos depositar nuestra creatividad en la esperanza de que el burro haga sonar la flauta. Recordemos pues que el 80% de una fotografía sigue y seguirá siendo el fotógrafo independientemente del equipo que use … y en lo que respecta al uso de la «ráfaga» parece que la gente olvida que el disparo en ráfaga no tiene nada de novedoso, y que los más aclamados maestros de la fotografía han disparado miles de carretes con fotografías que nadie nunca ha visto en pos del «momento mágico». ¿Ahora alguien dispara tres fotos seguidas y es un novato, o bien dispara 500 fotos en una sesión y es un ceporro?. Yo la verdad prefiero ser prudente y preguntar primero por qué has usado la ráfaga, o por qué disparaste 500 fotos.
@emilio fraguel rock: pero estamos hablando de una escena preparada, en donde sabes lo que va a ocurrir. Y aún así, creo que es mejor tirar unas cuantas fotos seguidas, que jugártela a la suerte y volver a repetir la escena hasta que salga.
Una vez tenemos en mente la foto, que más da lo rápido que seamos con el dedo.
@McBlade: al final se puede resumir en parte en eso, saber el por que de su uso.
Y como le he dicho al compañero anterior, creo que una vez que visualizamos la foto, poco importa la forma de conseguirla. El arte no es apretar el gatillo, sino crear una foto, y hay mucho más detrás de todo ello que sólo el simple hecho de disparar.
Un saludo.
Si bien es cierto que en muchas situaciones es necesario el uso de la ráfaga, yo soy aún de los que cree que es mejor pensar dos veces y disparar una. Sinceramente, creo que la ráfaga no es capaz de captar, en muchas veces, el «instante decisivo» que el Gran HCB definió. Él mismo comentó un millón de veces (ver entrevista de Cartier-Bresson con Charlie Rose) cómo en una ocasión mientras rodaba con una cámara de cine pidió a su ayudante que siguiese rodando mientras él tomaba la Leica y disparaba, y cómo luego al comparar los resultados no hubo un sólo fotograma que encajase con el momento que él eligió para disparar.
También por su parte Chien-Chi Chang, en un post en el blog de Magnum, comentaba cómo había decidido obligarse a disparar sólo una o dos veces en lugar de usar la ráfaga como medio de obligarse a reflexionar sobre lo que estaba haciendo.
Creo que de esto trata la fotografía. Hay veces que es necesario la ráfaga. Pero la ráfaga NUNCA dará una buena foto sin la reflexión previa. En deportes o fotografía de naturaleza (como por ejemplo ocurre en el trabajo de «Nick» Nickols) sin la ráfaga no se habrían plasmado fotos increíbles. Pero lo cierto que uno de los fotógrafos mas grandes de la historia nunca cambió su Leica III a pesar de no tener disparo en ráfaga.
@Alberto: es eso de lo que hablo, que la ráfaga no te va a dar una buena foto. Por lo tanto, que más da disparar todas las veces que se quiera, lo importante creo que es tener la idea y plasmarla. Si sale al disparar diez fotos en vez de una, la foto no va a ser peor.
Gracias por participar.
Un saludo.