Otro año más terminando comuniones, un tipo de fotografía que intento cambiar y ofrecer algo de lo que aborrecí en el pasado.
Recuerdo hace algo más de 20 años, cuando entraba en casa de mis amigos, con la típica foto en el salón con cara «apalominada», una expresión que no tenía nada que ver con aquella persona, una expresión forzada.