Desde hace un tiempo algunos me consideran un privilegiado, trabajar en lo que te gusta, vivir de ello, aunque quizás no se den cuenta de que está siendo bastante duro. Empezar de cero en cualquier profesión siendo autónomo, no es un camino de flores.
Cuando empiezas en este mundillo, tienes claro el tipo de fotos que te gustaría hacer y del cual, te gustaría vivir, pero las cosas al final no son como uno las imagina (al menos al principio).
Los primeros trabajos suelen ser de lo más diversos, además dependiendo de la zona en la que uno viva, tendrá acceso a una demanda más variable y con más alternativas. Pero cuando vives fuera del foco de ciudades como pueden ser Madrid y Barcelona, tienes que acogerte un poco a lo que haya.